Los platinos funcionan como un interruptor que, al separarse, interrumpe la corriente generando un salto en la chispa de la bujía. En los primeros motores era un interruptor mecánico, en la actualidad son más difundidos los interruptores electrónicos que se activan mediante imanes. Este nuevo sistema es más regular y funciona a más revoluciones y de manera más estable.
Si los platinos están ubicados en una posición relativamente accesible (esto depende del modelo y la marca de la motocicleta) pueden ser reemplazados sin la necesidad de recurrir a un profesional. Es de suma importancia conocer el punto en el cual la chispa debe saltar. Ya que debe ocurrir en el momento preciso en el que el motor lo requiere.
TIP: El punto en el que debe saltar la chispa suele estar detallado en el manual de marca.
Una vez reemplazados los platinos se debe ajustar la separación entre ambos. Para ajustar esta separación se regulan los tornillos que sujetan los platinos al motor. Para verificar que la separación es la correcta se hace uso de unas sondas (o galgas); unas láminas metálicas de determinados espesores.
Esto es muy importante, ya que si los platinos no se separan con precisión no producirán la chispa que el motor requiere.
TIP: Es recomendable cambiar también el condensador en la misma operatoria, ya que suelen ser piezas que dejan de funcionar en simultáneo.
Comprobaciones
Para comprobar el punto en el que salta la chispa podemos hacer uso de una lamparita (o bombilla) y una batería. Primeramente ubicamos el cable que une la bobina de alta y los platinos y colocamos allí la lámpara. Cuando el cigüeñal gire, la lamparita brillará poco a poco con más intensidad cuando los platinos se separen.
Para finalizar la comprobación resta solamente verificar ese momento en el que el pistón está en compresión. Este dato suele medirse en grados antes del PMS (punto muerto superior).
Claro que en motores de varios cilindros esta comprobación es mucho más compleja. En ese caso debemos verificar cuál es el primero de los cilindros en actuar, y comenzar a calibrar a partir del mismo.
A no desanimarse
Si bien parece un trabajo muy complicado, solo realizarlo un par de veces ya es suficiente para que se vuelva rutina. Más aún si tu vehículo tiene algunos años, ya que habrá que revisarlos con periodicidad.
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